Tú y yo, debemos hablar.
Discutir lo que hoy nos sucede.
¿Por qué he dejado de amar?
¿Y por qué en nuestro hogar llueve?
Yo recuerdo los tiempos felices,
Cuando tan sólo al verte, volaba.
Yo recuerdo qué tanto te amaba,
Y qué tanto me amabas tu a mí.
Yo recuerdo, después de un tiempo,
Cuando el sol se ocultó tras las nubes,
Que dejamos a un lado lo cursi,
Y la rutina nos fue a engullir.
Pero tú, sólo con tu sonrisa,
Iluminabas cada mañana,
Y renacía de nuevo mi alma,
La rutina dejaba de existir.
Y a medida que pasaban los años,
A medida que envejecía,
Tu sonrisa me daba la fuerza,
Que necesitaba para amarte y seguir.
Pero hoy, hace ya cuatro años,
Desperté y tú ya no estabas.
Tan sólo una tumba pulida,
Y las nubes que te ocultan de mí.
Quiero ver tu sonrisa de nuevo,
Quiero ver el amor en tus ojos,
Que mi alma se llene de vida,
Que mi amor sea querido por fin.
¿Dónde estás y por qué te has ido?
Si me ves, ¿por qué no me miras?
Si me oyes, ¿por qué no respondes?
Si me amas, ¿por qué ya no estás?
Quisiera estar en tu tumba.
Que durmieras a un lado, conmigo.
Compartir, como he compartido,
Y la vida y la muerte contigo.
Lunes, Noviembre 26 de 2018