… esa niña que yo alzaba fácilmente
Ya no pude levantarla
Pero su voz de niña tierna
Sigue siendo suave y bella.
Abuelito, como siempre
Me dice y siento
Que quisiera
Que no creciera.
Así es la vida.
El tiempo es inexorable
Y los años pasan
A veces sin darnos cuenta
Y mi nieta crece
Y me sigue amando
Como yo a ella.
Y dejará juguetes,
En especial muñecas
Pero para este abuelo
Siempre sigue siendo
Mi preciosa nieta.
Edgar Tarazona Angel