He dejado de sonar
las cadenas del tiempo,
ya no veré marchar
el último de mis sueños,
hoy respiro
porque todos esperan
verme comenzar.
No hay dioses esperando
mi lista de pecados
porque soy ya nada
he perdido tanto
perdí todo,
y eso es tanto como
una oportunidad.
Tanto soñé, que viviría
como hombre enamorado
que entrega hasta la piel
y hoy ya lo sé, ya no lo quiero
porque mis promesas
no salen del papel.
*
Hoy, en las canciones de la tarde
de cosas que no volverán
me queda la vida en un instante
lo que se quedó sin soñar
volver atrás, sin nada más,
sonriendo porque le amé demasiado.
*
Intento sentir más
intento sonreírle
un poco a mis miedos,
tanto que los quise como escudos
para cuando alguien
me intentara abrazar.
Nada qué entregar
en nombre del amor
porque en libertad
no importa la explicación
de por qué yo, esperé tanto,
sabiendo que nada
iba a pasar.
Tanto soñé, que viviría
como hombre enamorado
que entrega hasta la piel
y hoy ya lo sé, ya no lo quiero
porque mis promesas
se reducen al papel.
*
Hoy, en las canciones de la tarde
de cosas que no volverán
me queda la vida en un instante
lo que se quedó sin soñar
volver atrás, sin nada más,
sonriendo porque amé demasiado;
así se vuelve a empezar
en un rincón solitario
en un atardecer anaranjado
y luego, nadie.
*